La peque de la casa nos sorprende con esta cena que a mí me encantó.
Una receta fácil, ideal para cenas o para recibir visitas. Se trata de una forma original de empanar unas tiras de pechuga de pollo, ya que los kikos le dan ese toque crocante y un sabor especial.
Ingredientes:
- 1 pechuga de pollo
- 2 bolsas pequeñas de kikos
- pan rallado
- un huevo batido
- aceite de oliva
- un poco de sal
- kétchup, mostaza, salsa barbacoa o de yogurt para mojar.
Preparación:
En primer lugar lo que haremos es filetear las pechugas (ni muy finas ni muy gruesas) y, a continuación, cortarlas en tiras con un poco de grosor para poder rebozarlas mejor.
Las salpimentamos y las reservamos.
Por otro lado trituramos los kikos. Para ello podemos usar Thermomix ( 5-10 segundos a velocidad 4) u otro tipo de robot. También de forma manual podemos utilizar un mortero e intentar que queden trocitos (no es necesario que quede como pan rallado).
Mezclamos el pan rallado a partes iguales con los kikos. Por ejemplo, cuatro cucharadas de pan rallado y cuatro de kikos y mezclamos bien.
Batimos bien el huevo, ponemos el aceite a calentar en una sartén y disponemos los elementos para proceder al rebozado o empanado.
Primero pasamos las tiras de pechugas por huevo y luego las pasamos por la mezcla de kikos y pan rallado.
Freímos en el aceite y sacamos sobre un plato con papel absorbente para retirar el exceso de aceite.
Acompañar de tu salsa favorita y listas para disfrutar.
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